Así lo señaló ayer, el presidente de Gucci Marco Bizzarri, quien anunció que a partir de 2017, la casa de moda presentará en un mismo show sus confecciones femeninas y masculinas de cada temporada.

Recordemos que la marca corresponde al conglomerado de lujo Kering, que también posee a Saint Laurent, Balenciaga, Stella McCartney y Alexander McQueen, y que en el pasado se había opuesto a la medida “see now, buy now”, al que marcas como Burberry se han adjuntado para mostrar sus desfiles y que la ropa mostrada esté inmediatamente disponible para su venta.

Es por esto que en su declaración hecha en Versalles, durante una conferencia internacional sobre la industria del lujo, Bizzarri aclaró que seguirán con su modalidad “see now, buy later”, "para respetar las necesidades de los procesos de creación y producción en la moda de lujo", pero que avanzarán con este otro tipo de iniciativas, como lo será enseñar simultáneamente la ropa femenina y masculina en un solo desfile, en ruptura con la tradición de presentar la moda destinada a cada sexo en calendarios separados en cada semana de la moda de Nueva York, Londres, Milán o París.

Esta decisión sorprende bastante si se tiene en cuenta que la moda masculina está ganando terreno en el negocio de la moda, por lo que están proliferando la creación de nuevas pasarelas enfocadas exclusivamente en desfiles de moda de hombre. La última en nacer es Fashion Week New York Men.

El diseñador de Gucci, Alessandro Michele, se encargará de presentar la colección el próximo año, en un desfile único en la nueva sede milanesa de la marca de la Via Mecenate, según señaló un comunicado del grupo.

"Para mí es natural presentar mis colecciones masculina y femenina juntas. Corresponde con mi forma de ver el mundo de hoy", comentó Michele. Según el diseñador, "no será necesariamente un camino fácil y ciertamente planteará desafíos. Pero creo que me dará la posibilidad.

El año pasado, varias marcas se sumaron por ejemplo a la práctica “see now, buy now” (lo ve y lo compra) que les permite poner en venta los modelos el mismo día de presentación en las pasarelas.

La iniciativa levantó reservas entre algunos de los grandes nombres de la moda parisina, encabezados por Dior, que considera la práctica contraria a la creatividad.