La pasarela madrileña se desarrolla del 15 al 19 febrero y en esta 77 edición participan 40 diseñadores, entre consagrados y emergentes, y 200 profesionales en lo que es la convocatoria fashion más importante de España.

Durante 39 años se ha celebrado dos veces al año la creatividad de muchas de las agujas más relevantes de nuestro país, pero hasta ahora solo se podía acceder a la pasarela si eras prensa o invitado del diseñador, de la organización (Ifema) o de los patrocinadores. Sin embargo, ahora y por primera vez en la historia se vende el acceso como si de un concierto de Malú se tratase: «es un proyecto piloto», cuenta la dirección de Ifema, «porque seguimos manteniendo la distribución de 12.400 entradas gratuitas al Cibelespacio a través de nuestros patrocinadores».

La zona con nombre cósmico a la que hace referencia la dirección de MBFWM es la que se encuentra alrededor de las dos pasarelas, dentro del pabellón 14.1 de Ifema, donde los patrocinadores, revistas de moda y lifestyle, firmas de belleza y jóvenes diseñadores, exponen sus últimos productos.

El Cibelespacio es un extensión para entretenerse y a la que, hasta ahora, se podía acceder sólo con invitación gratuita física u online: «se agotaba en pocas horas», aseguran desde la organización, ya que muchos tickets «no se usaban» como consecuencia de «descargas masivas». Ahora, previo pago de 10 euros, se puede tener una experiencia cósmica y así recaudar para hacerla rentable, aunque desde Ifema destacan que es la única solución para «ordenar la demanda de accesos».

Si se pincha en la web de MBFWM se pueden comprar dos tipos de experiencias: la primera, ya citada del Cibelespacio en la que por 10 euros puedes posar en photocalls y asistir a actividades de los patrocinadores, ver y comprar en el showroom de Allianz EGO, asistir a sesiones de trabajo con influencers, charlas y descansar en el MBFWMadrid Café.

La segunda es algo más elevada, ya que su precio es de 60 euros y con esa entrada se puede disfrutar de un desfile a elegir, asistir al Kissing Room (zona en la que el diseñador de moda posa para los medios después del desfile) e incluye el acceso y disfrute al Cibelespacio.

«Hay que puntualizar que el espacio de compromisos del diseñador seguirá siendo por invitación de este», cuenta Pepa Bueno, directora ejecutiva de ACME (Asociación de Creadores de Moda de España). Aunque no conocemos ninguna fashion week internacional que ponga a la venta entradas, Pepa explica que es una estrategia de la convocatoria madrileña y da las razones por la que se ha llegado a hacer: La moda es en sí misma cambio, transformación y adaptación, algo que en los últimos años se ha agudizado de manera extrema.